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Recordando a Carmen Cárdenas


Carmen D'Escriván de Cárdenas

Como la hermosa planta acuática Victoria amazónica fue llamada Victoria Regina, Carmen Cárdenas hizo honor a la majestad de la tierra que la vio nacer, Guayana.

La Universidad Metropolitana, la Biblioteca Pedro Grases y toda la comunidad unimetana estarán para siempre en conciencia o no, en amorosa deuda con Carmen D'Escriván de Cárdenas que entregó su esfuerzo de una “profesional de primer orden” como la describía su Maestro Pedro Grases, a biblioteca que le ayudó a crear.
Pienso que existe la sincronicidad. En el momento en que el epónimo de la biblioteca y Carmen D'Escriván de Cárdenas se conocen, iniciaron una hermosa relación. El Dr. Grases fue su maestro en la UCV. Esta relación se cristalizará como fervorosa relación de discípula y Maestro cuando es elegida, al ordenar y catalogar la primera donación de la biblioteca privada del humanista y bibliólogo a la Universidad Metropolitana. Se inicia en los galpones donde ahora funciona Fundamet, mientras, la sede actual Biblioteca Pedro Grases se edificaba. Ambos participaron activamente en el proyecto aún en planos con los arquitectos, los hermanos Tomás y Eduardo Sanabria.

En el año 1983 queda inaugurada la Biblioteca Pedro Grases y a Carmen D'Escriván la nombran directora de la misma. Era el momento: de prever las bases del futuro los servicios al usuario, ubicación de las colecciones, evitar los extravíos de volúmenes, pensar en métodos de seguridad, las colecciones de Raros y Curiosos. La preocupación por la excelencia de hacer una biblioteca universitaria que prometía la magnitud actual con futuros desarrollos técnicos, inspira al Maestro y la envía a recorrer diversas universidades de los Estados Unidos, tales como la Biblioteca Lilly en Indiana, la Biblioteca del Congreso, y otras mas, conocidas por su eficiencia universitaria. A su regreso Carmen suma a sus bases de experiencias laborales anteriores, y a su preparación profesional, su nuevos conocimientos. De allí nace esta institución, fruto de como concibieron ambos desde su comienzo las sólidas bases, ahora, reconocida como una de las mejores bibliotecas del país. El ordenado entusiasmo y capacidad de trabajo de Cármen de Cárdenas, su oportuna intuición y el constante tesón de conocer las nuevas técnicas promovieron los servicios de catalogación moderna, el diseño de las políticas de desarrollo y enriquecimiento de colecciones, atención al público: estudiantes, tesistas e investigadores incluyendo el entrenamiento del equipo de trabajo que requería paciencia y comprensión, ejerciendo a su vez, la función de supervisión individualizada y general, además de difundir, con aciertos, la cultura en la sociedad educativa.

En su reciente ida física los que tuvimos la suerte de estar a su lado y aprender de su seria profesionalidad, elegancia de formas y eficiencia, sentimos la profunda pérdida de su marcha, Carmen D'Escrivan de Cárdenas se ha llevado con si mucha memoria de esfuerzos comunes en proyectos, alegrías y éxitos compartidos en esta nuestra querida Unimet, donde la Biblioteca Pedro Grases se reconoce como su Alma Mater.

Quiero dar las gracias a la Dra. Eleida García, actual directora de la biblioteca Pedro Grases que, por iniciativa suya me brinda escribir sobre Carmen en su honor y con un muy merecido reconocimiento no sólo por los muchos años de devoción sino por la calidad de su entrega y los logros que disfruta la comunidad unimetana...

Maria A. Grases Galofré

 

 

Carmen D'Escriván de Cárdenas