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¿Qué pasó? El 31 de octubre, los estudiantes de la Universidad Metropolitana comenzaron a congregarse cerca de la pequeña mesa que se había dispuesto para colocar una taza de café y un micrófono. A la izquierda, un panel con el afiche publicitario del evento mostraba una humeante taza de café y los nombres de los escritores invitados por la Biblioteca Pedro Grases para la primera sesión del CAFÉ CON LETRAS. Esta actividad cultural se programó para realizarla cuatro veces por semestre con el propósito de llamar la atención del estudiantado y romper con la rutinaria presentación en auditorios. De esta manera, se tomaba por sorpresa a los estudiantes que se dirigían al cafetín y se ocupaban espacios frente a los módulos de aulas y al aire libre. Y les gustó, a ellos, a los estudiantes le gustó. ¿Qué les gustó? la oportunidad de conocer personalmente a nuestros escritores, dialogar y establecer por primera vez en la Universidad Metropolitana ese canal aproximativo entre la comunidad estudiantil, las artes, la poesía y la narrativa contemporánea donde el delegado del curso u otro estudiante, fuese el anfitrión de cada uno de los escritores invitados para ese martes. Porque el café con letras se toma los martes. El primero de nuestros invitados fue el escritor venezolano David Alizo, eterno enamorado del mundo griego y re-creador de Safo, figura mítica y la más grande poetisa de la tierra. Alizo conversó con los estudiantes sobre su última novela: Safo de Mil Amores (2005) donde nos revela la vida de esta poeta, su rebeldía y la libertad del amor en la Grecia antigua. Los estudiantes que intervinieron en la conversación con el escritor, plantearon sus preguntas sobre la libertad sexual en la época de Safo. El interpelado tocó el tema de la homosexualidad con delicadeza y fina elegancia desde una perspectiva muy personal. DAVID ALIZO La segunda invitación recayó sobre la poeta Ana María del Re ofreciéndonos algunos poemas de sus Nocturnos a plena luz del día mientras los “Nocturnos” de Chopin escanciaban notas dulces sobre el césped dejándose acompañar por el rumor que dejaba la brisa en el follaje. Leyó para los estudiantes algunos de sus breves poemas y explicó la relación que existe entre los “nocturnos” en música y en poesía. Una estudiante le preguntó qué significado tenía la noche para ella y si era noctámbula. Ana María del Re confesó su debilidad por esas horas cuando, para la mayoría de las personas, se instala el sueño. ANA MARÍA DEL RE Un solo de trompeta tocando el tema de Aída, anunció a la tercera invitada: la novelista Antonieta Madrid quien reflexionó sobre el acto de escribir tal como lo atestigua en su texto: Escribir es… “Escribir es silencio y soledad. Es como viajar sin mapas, desde las zonas más recónditas, hacia lugares desconocidos, dibujando sobre la marcha, las distintas rutas…” Nos recreó, también, con uno de sus relatos breves: “Al filo de la vida” y respondió a preguntas como ¿por qué y desde cuando escribe? ANTONIETA MADRID El cuarto invitado y último en la primera sesión del Café con Letras fue el laureado escritor y novelista Adriano González-León. Después de haberse tomado todas las letras del café, el autor de País Portátil coronó la actividad cultural con una charla sobre el origen de la escritura. Por la intensidad de los temas que escoge, su inteligencia, agradable locuacidad y entretenida conversación, los estudiantes disfrutaron mucho de este encuentro pues Adriano González-León les supo hablar en su lengua, usando frases y palabras que en varias ocasiones nos arrancaron risas y carcajadas cuando señalaba los disparates políticos que acontecen en este país mientras siga siendo portátil. ADRIANO GONZÁLEZ LEÓN Matilde Daviu |